Tras el motín en la cárcel de Devoto la Iglesia mostró preocupación y reclamó “medidas extraordinarias”

La comisión episcopal de Pastoral Carcelaria de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) propone sumarse a “una mesa de diálogo” y pide un “pronto tratamiento” de la emergencia sanitaria en los penales.

La Iglesia​ le pidió a los tres poderes del Estado “una política coherente” para prevenir la expansión del coronavirus y se ofreció a integran una “mesa de diálogo” para acordar medidas en ese sentido ante la creciente tensión en las unidades penitenciarias de todo el país y en particular en la de Devoto, que ayer se amotinaron durante nueve horas.

Tras el motín en la cárcel de Devoto la Iglesia mostró preocupación y reclamó “medidas extraordinarias”

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El motín en Devoto finalizó luego de que los delegados de los presos firmaron un acta en la que se comprometieron a levantar la medida y a dialogar durante el fin de semana, pero el conflicto persiste y se sumó a los incidentes en unidades de Florencio Varela y Corrientes, con dos presos muertos, y Las Flores y Coronda, con cinco internos fallecidos.

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“Con dolor, gran preocupación y apoyados en la oración como pastores del Pueblo de Dios volvemos a ofrecernos, como en tantas mesas de diálogo, para buscar juntos caminos posibles ante esta emergencia sanitaria; sobre todo para con los más desprotegidos y vulnerables”, dice la Pastoral Carcelaria del Episcopado argentino en un comunicado.

Advierte en ese sentido que “las cárceles y complejos penitenciarios son uno de los ámbitos que en esta situación merecen mayor cuidado y atención, no sólo por ser espacios de encierro sino, y sobre todo, por el hacinamiento en que se vive hace años”.

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Destaca que “cualquiera sea su situación, nadie por haber delinquido, pierde su condición de persona, de Hijo de Dios y de miembro de la familia humana”. “Por ello consideramos fundamental establecer una política coherente de recursos humanos, pues las personas que trabajan en las cárceles son protagonistas centrales del tratamiento penitenciario”, señala. Y puntualiza que también “para asegurar y proteger, con recursos necesarios de todo tipo, la lucha contra el contagio del Covd-19 es indispensable el Estado presente con sus tres poderes: legislativo, judicial y ejecutivo”.



En referencia a la situación carcelaria, afirma que “nuestro país en distintos órdenes y estamentos refleja grandes contradicciones y carencias que si bien no son nuevas, a medida que no se asumen y enfrentan, agudizan y deterioran notablemente el tejido social”. ”En la sobrepoblación carcelaria se ponen de manifiesto realidades que urgen pronto tratamiento:... Presos sin condenas...”, señala.

Subrayan al respecto que “las situaciones de violencia, abandono, indiferencia, egoísmo, olvido y división provocan lesiones casi mortales en una sociedad como la nuestra que ya no soporta más atropellos a los derechos humanos”.

“Volvemos a comprometernos junto a nuestros agentes pastorales: sacerdotes, diáconos, religiosas y religiosos, laicos y las comunidades de nuestras diócesis para brindar dentro de nuestras posibilidades el cobijo para que todos podamos “remar juntos” ante la tempestad de esta pandemia”, concluyen.

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