El otro sobreviviente del conductor borracho que atropellĂł a un ciclista.
Juan Rojas manejaba el auto contra el que chocĂł Miguel Ivanovich, que estaba borracho. Un rato antes habĂa arrollado a Sebastián Devoto, que sigue en grave estado.
La madrugada del miĂ©rcoles de la semana pasada, Miguel Ivanovich, con 2.14 gramos de alcohol por litro de sangre, provocĂł una madrugada de tragedia y locura en Villa Devoto. En un raid que incluyĂł velocidad y semáforos en rojo, atropellĂł y dejĂł gravemente herido a Sebastián Devoto, que iba en bicicleta. Minutos despuĂ©s chocĂł a un auto que estaba parado en un semáforo. Su conductor, Juan Eduardo Rojas, de 28 años, fue el primero que tuvo contacto con Ivanovich. TodavĂa con secuelas por el tremendo golpe, hablĂł de las secuelas del golpe, contĂł que conocĂa a Devoto de antes y considerĂł que, si no chocaba contra su auto, Ivanovich se escapaba.
"Estaba en el semáforo, se pone en verde, iba a avanzar y siento un golpe tremendo, que me dejó estas secuelas. Me movà para todos lados adentro del auto", comenzó el relato. Con "estas secuelas" se refiere a un cuello ortopédico que debe usar por daños en las vértebras lumbares y cervicales.
"Cuando me bajo, me encuentro con este tipo en estado de ebriedad. Y le digo quĂ© hiciste. Vi que intentaba poner en marcha el auto para irse. Me dice que no podĂa abrir la puerta, me hacĂa un gesto de ok, como que no habĂa pasado nada. Miraba para todos lados, no enfocaba bien y se olĂa a alcohol", siguiĂł su narraciĂłn, que se vio en TelefĂ© noticias.
ClarĂn se comunicĂł con Rojas este miĂ©rcoles al mediodĂa. Sobre esa madrugada fatĂdica recordĂł: "Estaba yendo a buscar un cliente. SalĂ con tiempo, para cargar combustible. La idea era llegar tranquilo. Y cuando estaba por poner primera sentĂ ese golpe tremendo que me hizo pelota. Esto me arruinĂł la vida. Yo trabajo con el auto. Lo Ăşnico que puedo considerar positivo es que si no choca contra mĂ se escapa. Por eso pudieron detenerlo. De otra forma habrĂa pasado como en esos casos en los que un borracho atropella a alguien pero nunca lo encuentran".
DespuĂ©s Rojas contĂł: "Le saquĂ© una foto a la patente y llamĂ© al 911. Dije que una persona en estado de ebriedad me habĂa chocado y se estaba dando a la fuga. AhĂ, este hombre se baja e intenta empujar el auto hacĂa atrás para irse. La gente que pasaba con su auto me decĂa que venĂa saltando semáforos en rojo y uno contĂł que creĂa que habĂa atropellado a alguien".
Todo fue en la madrugada del miĂ©rcoles. Ivanovich, que permanece con prisiĂłn preventiva acusado de lesiones culposas (tiene una pena prevista de entre 2 y 4 años de prisiĂłn), "apenas podĂa modular", segĂşn recuerda Rojas.
Ante semejante impacto (en el video se ve que Ivanovich frena contra el vehĂculo, un Chevrolet Prisma gris oscuro), Rojas puede ser considerado un sobreviviente. "Me dañó la parte cervical y lumbar. No puedo dormir de los dolores y estoy medicado. No estoy trabajando. La cabeza me trabaja a mil. Cada vez que parĂł en un semáforo espero que no me choque otro auto. Me quedĂł ese miedo. Tengo que ver si se me pasa. Estoy bastante preocupado", siguiĂł su narraciĂłn en diálogo con ClarĂn, y destacĂł: "Todos los dĂas veo el video y no lo puedo creer. Fue una locura".
Rojas le contĂł a este diario que está casado y que tiene una hija de dos semanas. "No puedo dejar de pensar en ella, en sĂ me pasaba algo", se angustia. "Encima yo lo conocĂa a Sebastián. Hasta hace cinco meses yo vivĂa frente a la estaciĂłn de servicio donde Ă©l labura, en BeirĂł y Lincoln. Iba dos o tres veces por dĂa a cargar nafta o a inflar las gomas y siempre charlábamos. Es un laburante como yo", dijo, e insistiĂł: "Él se llevĂł la peor parte. Lo Ăşnico que puedo rescatar es que gracias a mĂ, a pesar de todo lo que pasĂł, el tipo parĂł. Porque si no chocaba se iba y nadie más lo encontraba".
Rojas asegura que el abogado le dijo que el seguro no se hará cargo de reparar los daños de su auto, que quedĂł inservible. El nivel de alcoholemia de Ivanovich, sumado a otras irregularidades, hacen que se dificulte recuperar algo del valor del vehĂculo en lo inmediato "Me arruinĂł la vida, me dejĂł secuelas y me hizo pelota el auto, pero por lo menos está detenido. Yo al otro chico lo quiero ayudar en lo que pueda", se esperanza Rojas.
En cuanto al estado de salud del ciclista y playero, Ana, su esposa, contó que "le están sacando los sedantes para ver como reacciona. Más allá de todas las complicaciones sigue grave, porque el daño en el cerebro está". Devoto y su mujer son padres de dos hijos.
La madrugada del miĂ©rcoles de la semana pasada, Miguel Ivanovich, con 2.14 gramos de alcohol por litro de sangre, provocĂł una madrugada de tragedia y locura en Villa Devoto. En un raid que incluyĂł velocidad y semáforos en rojo, atropellĂł y dejĂł gravemente herido a Sebastián Devoto, que iba en bicicleta. Minutos despuĂ©s chocĂł a un auto que estaba parado en un semáforo. Su conductor, Juan Eduardo Rojas, de 28 años, fue el primero que tuvo contacto con Ivanovich. TodavĂa con secuelas por el tremendo golpe, hablĂł de las secuelas del golpe, contĂł que conocĂa a Devoto de antes y considerĂł que, si no chocaba contra su auto, Ivanovich se escapaba.
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¿ QuĂ© dice la declaraciĂłn del conductor que arrollĂł al ciclista?
"Estaba en el semáforo, se pone en verde, iba a avanzar y siento un golpe tremendo, que me dejó estas secuelas. Me movà para todos lados adentro del auto", comenzó el relato. Con "estas secuelas" se refiere a un cuello ortopédico que debe usar por daños en las vértebras lumbares y cervicales.
"Cuando me bajo, me encuentro con este tipo en estado de ebriedad. Y le digo quĂ© hiciste. Vi que intentaba poner en marcha el auto para irse. Me dice que no podĂa abrir la puerta, me hacĂa un gesto de ok, como que no habĂa pasado nada. Miraba para todos lados, no enfocaba bien y se olĂa a alcohol", siguiĂł su narraciĂłn, que se vio en TelefĂ© noticias.
Mirá también
Quien es el conductor que arrollĂł al ciclista?.
ClarĂn se comunicĂł con Rojas este miĂ©rcoles al mediodĂa. Sobre esa madrugada fatĂdica recordĂł: "Estaba yendo a buscar un cliente. SalĂ con tiempo, para cargar combustible. La idea era llegar tranquilo. Y cuando estaba por poner primera sentĂ ese golpe tremendo que me hizo pelota. Esto me arruinĂł la vida. Yo trabajo con el auto. Lo Ăşnico que puedo considerar positivo es que si no choca contra mĂ se escapa. Por eso pudieron detenerlo. De otra forma habrĂa pasado como en esos casos en los que un borracho atropella a alguien pero nunca lo encuentran".
DespuĂ©s Rojas contĂł: "Le saquĂ© una foto a la patente y llamĂ© al 911. Dije que una persona en estado de ebriedad me habĂa chocado y se estaba dando a la fuga. AhĂ, este hombre se baja e intenta empujar el auto hacĂa atrás para irse. La gente que pasaba con su auto me decĂa que venĂa saltando semáforos en rojo y uno contĂł que creĂa que habĂa atropellado a alguien".
Todo fue en la madrugada del miĂ©rcoles. Ivanovich, que permanece con prisiĂłn preventiva acusado de lesiones culposas (tiene una pena prevista de entre 2 y 4 años de prisiĂłn), "apenas podĂa modular", segĂşn recuerda Rojas.
Ante semejante impacto (en el video se ve que Ivanovich frena contra el vehĂculo, un Chevrolet Prisma gris oscuro), Rojas puede ser considerado un sobreviviente. "Me dañó la parte cervical y lumbar. No puedo dormir de los dolores y estoy medicado. No estoy trabajando. La cabeza me trabaja a mil. Cada vez que parĂł en un semáforo espero que no me choque otro auto. Me quedĂł ese miedo. Tengo que ver si se me pasa. Estoy bastante preocupado", siguiĂł su narraciĂłn en diálogo con ClarĂn, y destacĂł: "Todos los dĂas veo el video y no lo puedo creer. Fue una locura".
Rojas le contĂł a este diario que está casado y que tiene una hija de dos semanas. "No puedo dejar de pensar en ella, en sĂ me pasaba algo", se angustia. "Encima yo lo conocĂa a Sebastián. Hasta hace cinco meses yo vivĂa frente a la estaciĂłn de servicio donde Ă©l labura, en BeirĂł y Lincoln. Iba dos o tres veces por dĂa a cargar nafta o a inflar las gomas y siempre charlábamos. Es un laburante como yo", dijo, e insistiĂł: "Él se llevĂł la peor parte. Lo Ăşnico que puedo rescatar es que gracias a mĂ, a pesar de todo lo que pasĂł, el tipo parĂł. Porque si no chocaba se iba y nadie más lo encontraba".
Rojas asegura que el abogado le dijo que el seguro no se hará cargo de reparar los daños de su auto, que quedĂł inservible. El nivel de alcoholemia de Ivanovich, sumado a otras irregularidades, hacen que se dificulte recuperar algo del valor del vehĂculo en lo inmediato "Me arruinĂł la vida, me dejĂł secuelas y me hizo pelota el auto, pero por lo menos está detenido. Yo al otro chico lo quiero ayudar en lo que pueda", se esperanza Rojas.
En cuanto al estado de salud del ciclista y playero, Ana, su esposa, contó que "le están sacando los sedantes para ver como reacciona. Más allá de todas las complicaciones sigue grave, porque el daño en el cerebro está". Devoto y su mujer son padres de dos hijos.
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