Confirmaron a Caló como nuevo jefe de la CGT “K”
Confirmaron a Caló como nuevo jefe de la CGT “K”.
El metalúrgico tiene el apoyo de los gremios cercanos al Gobierno. Ahora coexistirán cinco centrales sindicales.
Caló. |
4/10/12
Tras un congreso en el estadio de Obras Sanitarias, el metalúrgico Antonio Caló fue nombrado ayer como nuevo jefe de la CGT oficialista. “Asumo la responsabilidad de defender a este modelo, pero también le vamos a decir (al Gobierno) cuando estén equivocados, con todo el respeto”, aseguró ayer Caló en su breve discurso de asunción.
Así, un día después de la decisión de presentar una lista única, la central obrera que está enfrentada con Hugo Moyano logró formar una mesa de conducción integrada por “Gordos”, “independientes” y algunos ex moyanistas. Ahora, en la Argentina coexistirán cinco centrales obrera. Habrá tres CGT: la del Camionero, la de Caló y la Azul y Blanca, comandada por el gastronómico Luis Barrionuevo. Y dos CTA: la oficialista de Hugo Yaski y la anti K, de Pablo Micheli.
¿Cómo afectará al Gobierno esta fragmentación? Dependerá de la evolución de la economía, aunque más centrales obreras implicarían reclamos más diversos y más difíciles de afrontar.
Tras un congreso en el estadio de Obras Sanitarias, el metalúrgico Antonio Caló fue nombrado ayer como nuevo jefe de la CGT oficialista. “Asumo la responsabilidad de defender a este modelo, pero también le vamos a decir (al Gobierno) cuando estén equivocados, con todo el respeto”, aseguró ayer Caló en su breve discurso de asunción.
Así, un día después de la decisión de presentar una lista única, la central obrera que está enfrentada con Hugo Moyano logró formar una mesa de conducción integrada por “Gordos”, “independientes” y algunos ex moyanistas. Ahora, en la Argentina coexistirán cinco centrales obrera. Habrá tres CGT: la del Camionero, la de Caló y la Azul y Blanca, comandada por el gastronómico Luis Barrionuevo. Y dos CTA: la oficialista de Hugo Yaski y la anti K, de Pablo Micheli.
¿Cómo afectará al Gobierno esta fragmentación? Dependerá de la evolución de la economía, aunque más centrales obreras implicarían reclamos más diversos y más difíciles de afrontar.