Un Coppola experimental.
Noticias del Cine. Presentó “Twixt” Su nueva película combina terror, thriller y algunos toques surrealistas. |
Muchos afirman que está en franca decadencia. Lo cual no deja de ser, en parte, cierto. La sala en la que tuvo su premiere mundial Twixt -que juega con el término en inglés twist-, de Francis Ford Coppola, tardó en llenarse. Es que el realizador de Apocalypse Now no es el de antes, y ya casi no estrena sus películas fuera de los EE.UU. y Francia. Cansado como ha manifestado del establishment y decidido a experimentar y rodar filmes de bajo presupuesto, Coppola ha vuelto a sus primeros palotes, haciendo un filme que mezcla el terror con el thriller y obsesiones -ya se verá- más personales. El protagonista es Hall Baltimore, un regordete Val Kilmer (alguna vez, Batman) un escritor de novelas de terror de cuarta que llega a un pueblito a vender su nuevo opus. Ni librería hay para presentarlo, y el sheriff del lugar (Bruce Dern, otro resucitado) le cuenta que está tratando de dilucidar la muerte de una joven, que está en la morgue en la propia comisaría. Pero Hall ha perdido a su hija, y en un motel de los alrededores hace unos años un pastor masacró a una docena de niños... Lo que faltaba era que Hall se encontrara una noche con el fantasma de una de las niñas (Ellen Fanning, de Super 8 ) y... con Edgar Allan Poe (Ben Chapiln) para que el combo sea entre surrealista y de terror, por varios motivos. A diferencia de Tetro , que sí era más ambiciosa, Twixt no es más que una diversión, que incluye escenas en 3D (no toda la película, cuando hay que ponerse los anteojitos aparecen en pantalla los cristalitos rojo y verde como avisando que llegó el momento). Como decíamos al comienzo, la película tiene mucho de la obra y de la vida personal del director de El Padrino . Por empezar, la muerte de la hija del protagonista es bastante similar a la del primogénito de Coppola, Gian-Carlo, que falleció decapitado en un accidente náutico por un cable de remolque entre dos embarcaciones. Por otro, desde hace ya tiempo su hija Sofia viene indagando en la relación padre-hija, otro centro en el nuevo filme de Coppola. “Todos los padres se sienten responsables de lo que puede sucederle a sus hijos, pero no me había dado cuenta de lo mucho que me sentía personalmente responsable de lo ocurrido hace 20, 24 años con Giancarlo. Podría haber ido; él quería que yo fuera. Yo debería haber estado allí. Si me voy a sentir mejor ahora, no lo sé”, dijo el realizador, conmovido, en la conferencia. Sin embargo, la película tiene mucho humor -pero premeditado, no arranca sonrisas de lo mala que es- y es un guiño a un tipo de cine que Coppola supo cultivar en sus comienzos, cuando era discípulo y asistente de Roger Corman. Así, en 1963 rodó Dementia 13 , con el equipo y los actores de Corman cuando éste no estaba filmando... La música fue compuesta por el platense Osvaldo Golijov, quien ya había trabajado en Juventud sin juventud y Tetro . Ningún distribuidor argentino estuvo presente en la función de Twixt ..., pero con Coppola nunca se sabe. “Mi carrera es muy bizarra. Ahora que estoy más viejo son más amables conmigo. Pero la verdad es que siempre tuve malas críticas y por momentos me preocupé por cómo iba a mantener a mi familia”, dijo. |
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