Top Ad unit 728 × 90

Ultimas Noticias

Villa-Devoto

Julianne Moore: “Tengo que disfrutar lo que hago”

Compartir
Personajes.

Es una de las protagonistas de la comedia “Loco y estúpido amor”. Aquí habla de la industria del cine, y de su vida y su trabajo después de los 50.
Difícil comienzo para Julianne Moore el de Loco y estúpido amor. “En la primera escena, Steve Carell está llorando y se tira de un auto y ¿de quién es la culpa? Mía. Pensé: ¿cómo voy a recuperarme de esto? ¡El público me va a odiar! ”. Pero no: si bien esta vez sobreactúa un poco, gracias a su oficio logra hacer “un ser humano interesante” de su criatura, esa madre de familia que quiere el divorcio después de mil años de matrimonio. “Ese siempre es el desafío: dotar de complejidad y dimensión humana a los personajes”.

La máxima motivación que invoca para haber aceptado trabajar en esta comedia romántica es compartir escenas con Carell. La segunda, “que es una película sobre vínculos y la primacía del amor y la familia en nuestras vidas”. No exige mucho más que eso: Moore es realista sobre su profesión. “El mundo del espectáculo es una empresa comercial. Y cualquiera que piense lo contrario, se está engañando. Es un negocio. Incluso las películas independientes lo son”. Pero, ¿no hay películas o series que ayudan a tomar conciencia sobre determinados temas? “Francamente, no lo creo. El show business nunca propone nada; se limita a reflejar lo que está sucediendo en la sociedad. Si algo está en la televisión, es porque es normal, ya existe. Si Mi familia se pudo hacer recién el año pasado y no hace diez es porque el show business se pone al día. Las innovaciones primero ocurren en el mundo real, después el mundo del entretenimiento toma nota y las refleja”.

Moore se refiere a la película en la que Annette Bening y ella eran pareja y madres de dos hijos concebidos por inseminación artificial. Su escepticismo en cuanto al altruismo hollywoodense, de todos modos, no evita que deje constancia de sus posturas políticas. “No creo que tenga más responsabilidades que cualquiera, sino más oportunidades. Me hacen más preguntas, lo cual me da una plataforma para decir ciertas cosas”. Así nos enteramos de que es simpatizante de los demócratas, militante por el matrimonio igualitario -que todavía no es legal en la mayoría de los Estados Unidos- y de cuál es su mayor decepción con el gobierno de Obama: “No veo inversión en educación, y es lo que más necesitamos para revertir esta situación de desempleo feroz”.

Ella sabe lo que es luchar por ganarse un lugar: hasta los treintilargos, parecía condenada a ser una eterna actriz de reparto. Pero el sexo hizo lo suyo: llamó la atención con un desnudo frontal en Ciudad de ángeles (1993), con su encarnación de una actriz porno decadente en Boogie Nights (1997), y con la artista sexópata de El gran Lebowski (1998). Resultado: cuatro nominaciones al Oscar -todavía no lo ganó- y varios protagónicos destacables, como Las horas o Lejos del paraíso (ambas de 2002).

Ahora, a los 50, Moore es una de las pocas actrices que no parece haber pasado por el quirófano. Si lo hizo, le tocó un maestro del bisturí: su rostro cubista sigue siendo expresivo. “Estoy en ese punto de la vida en que sabés que tenés menos tiempo por delante que por detrás. Lo que aprendí es que lo que importa no es el resultado final, sino el camino. Y que tengo que disfrutar lo que hago, porque es todo lo que tengo”.

No hay comentarios.:

Powered By Blogger, Designed by Sweetheme

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.