Independiente empató en Córdoba y no pudo alcanzar a Argentinos.
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Fue 0-0 ante Belgrano, que lo complicó hasta el final. Con este resultado, el equipo de Brindisi sigue en zona de descenso y puede quedar más comprometido si los de La Paternal ganan el lunes en La Plata.
 Independiente
26/5/13
Independiente jugó con la calculadora en la mano en su paso por Córdoba. Hizo cuentas y pensó que sumar un punto ante el incómodo Belgrano era un buen resultado. Y con esa idea planteó un partido áspero, friccionado y en el que escasearon las acciones de peligro. El equipo de Brindisi sumó su quinto partido sin derrotas y la distancia con Argentinos, que mañana visita a Estudiantes, ahora es de apenas dos puntos. No se vio en el Mario Kempes el Independiente avallasante que sí se vio siete días atrás ante San Martín de San Juan. Esta vez se observó un equipo más cuidadoso, menos ambicioso. Se notó desde el pitazo inicial de Maglio. Porque Montenegro jugó a kilómetros de distancia de Fernández y Caicedo y cuesta mucho encontrar una situación de riesgo. La única llegó en el primer minuto de descuento, con un tiro del juvenil Eloy Rodríguez que pasó a centímetros del palo. Casi lo gana en la bola final. Pero, en definitiva, los avences de Independiente fueron arrestos individuales que no dieron sus frutos y permitieron que Olave pasara una de las tarde más tranquilas del campeonato. Belgrano, por su parte, asumió un rol más protagónico. Especialmente en la primera parte y con el veloz Melano como estandarte. Fue este juvenil el que llevó a la rastra a Morel Rodríguez pero decidió mal el final de la acción. También el que le ganó al fondo de Independiente y definió mal ante la salida apresurada de Rodríguez. Márquez, en tanto, estuvo cerca de gritarlo con un derechazo que pasó cerca del travesaño. En la segunda parte, Belgrano mantuvo esa leve superioridad y casi lo grita con un remate del ingresado Zelarrayán que le sacó chispas al palo de Rodríguez. Y el Picante Pereyra, a cinco del final, estrelló un zurdazo en el travesaño que paralizó los corazones de los hinchas de Independiente. El puntito, de todos modos, le cierra a Belgrano, que quedó ahí nomás de la Copa Sudamericana. Fue, en definitiva, un encuentro ordinario, para el olvido. Un partido chiquito que defraudó a una multitud (más de 50 mil personas) en la tarde cordobesa. En el que Independiente no se animó a más. Le gustó el puntito desde el comienzo y se enamoró enseguida. ¿Le servirá a la hora del recuento? ¿Lo lamentará? Quedan cuatro fechas y los de Avellaneda siguen sumergidos en la zona del descenso. Ahora, por lo pronto, los hinchas de Independiente tendrán que hacer fuerza por Estudiantes. |
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